¿Buscar o dejar que te encuentren?

Ya asumí que mi "radar" para elegir a los hombres debe de tener algun fallo, porque parece ser que no acierto nunca con el indicado, jajaja.

Por eso, hace algún tiempo estoy pensando en la posibilidad de dejar de buscar... y simplemente sentarme a que me encuentren.
Esto no va mucho con mi caracter, soy una mujer más bien proactiva, pero cuando el radar esta claramente estropeado solo hay dos opciones: arreglarlo o apagarlo. De momento no se como arreglarlo, porque no se que es lo que falla, asi que quizá, la solución sea la misma de cuando falla el router... apagar y volver a encender.

Con lo cual, decidí apagarlo y ¡oh milagro! alguien me encontró.

Primero que nada, sorprende y asusta la rapidez, esa es la verdad, jejeje pero, ¿será que cuando corres buscando hacia adelante, huyes de los que vienen detrás? La verdad es que no lo se, y de momento estoy en una fase de espectación/estupefacción que me tiene sin saber que pensar, porque se me plantea una problema. Al ser el "buscado" y no el "buscador", cabe la posibilidad de que el que te encuentra, no cumpla con las características esperadas... y ahi está el lio.

De momento para mi, es muy pronto para juzgar, pero quiero ser positiva y pensar que quizá el fallo de mi "radar" pueda estar en dichas características, por lo que salirme de ellas puede ser beneficioso para conocer cosas nuevas, y calibrar el perfil de hombre que realmente me conviene.
La cosa está en poder "experimentar" sin dañar los sentimientos de nadie y en saber equilibrar las preferencias que ya tenemos con los nuevos aspectos. También es duro admitir que ciertas cosas que nos atraen de los hombres, pueden no convenirnos, porque aceptemoslo, eso solo lo aprendemos a las malas, jajaja. "Si quieres resultados diferentes, no hagas siempre lo mismo" dice el refrán y parece que a veces nos empeñamos en buscar lo que ya sabemos que no funcionó, por lo tanto quizá no parezca tan loco relajarse un poco y no cerrar las puertas a esos que creemos "no son nuestro tipo" si se nos despierta, auqnue sea, la más mínima curiosidad.

Los "nunca" y los "siempre" no me gustan, porque la vida tiene muchas excepciones, pero a pesar de todo, estoy convencida que, aparte de algunas sorpresas, lo que realmente resulta es encontrase mutuamente. Aunque parezca una posibilidad entre un millón encontrar a la persona que coincida con lo que buscamos y que MÁS ENCIMA nos considere de la misma manera, hay que pensar que entre cientos de ellas, hay una para nosotras, ¿no? Solo hace falta paciencia y seguir buscando... pero parando de vez en cuando para descansar y dejar que nos alcancen... por si acaso... ;)

Veritz